Las habitaciones son espaciosas y asequibles, ofrecen vistas al mar. El desayuno es generoso. La ubicación es increíble, cerca del Promenade Maurice Rouvier. El restaurante de playa es agradable para relajarse. El personal es amable y ofrece un buen servicio. La zona de la piscina es genial.

El lugar era realmente encantador y estupendo, justo al lado de la playa y restaurantes y también de tiendas restaurantes, y la vista era muy pintoresca. La habitación era muy bien amueblada, sorprendentemente nueva y tenía un minibar, una caja fuerte personal y una mesa de trabajo. Lo que hizo de la estancia una verdadera experiencia de 4 estrellas fue el servicio, que era muy bueno.

Ubicación encantadora muy, pero que muy cerca del centro de la ciudad y de restaurantes y bares y de la naturaleza en una zona muy tranquila.

El hotel estaba impecable, las habitaciones eran sorprendentemente nuevas y el personal eficiente. Reservé una habitación con unas vistas muy pintorescas. Un diseño increíble, un servicio excelente en todo el hotel. Además, aparqué en la propiedad. La propiedad tenía su propio restaurante de playa, era excelente.

Es un hotel bien situado y muy cómodo para ir a las playas de CAP Ferrat sobre todo a la Paloma.

Las paredes son un poco delgadas y se filtra el ruido.

el personal ha estado correcto,y se han esforzado en hablar en español, las habitaciones estan bien y todo muy limpio, a un paso de la playa y un paseo muy bonito.

El hotel se encuentra en un edificio hermoso, recién renovado con un estilo encantador. La ubicación es clave, a solo unos pasos de la playa y cerca de varios restaurantes. Disfruté especialmente del desayuno delicioso en la encantadora terraza. Además, el personal era muy amable y siempre dispuesto a ayudar.

Aunque mi experiencia general fue excelente, hubo un incidente desafortunado durante mi estancia. Me quedé encerrado en el ascensor durante casi 25 minutos.

La habitación tenía una decoración tradicional. Había un baño lujoso. Los desayunos eran en la panadería. La ubicación era céntrica, cerca de la estación de trenes. Estaba al lado de una montaña, restaurantes, la playa y tiendas.

La ubicación del hotel era realmente encantadora y estupenda, cerca de la estación. La habitación era práctica, con un buen diseño y de buen tamaño, con un baño espacioso, eso nos gustó mucho. - Los servicios eran muy buenos.

El lugar era cómodo y también ideal, los espacios públicos estaban impecables, el personal era asombrosamente atento. La habitación era bien equipada y bien cuidada, con una caja fuerte, un refrigerador minibar, una plancha y tabla de planchar como se muestra en la publicidad. El servicio fue realmente bueno en general. Además, el parking estaba en la propiedad.

El hotel era súper tranquilo, perfecto para unas vacaciones relajadas. Además, estaba a solo 2 minutos caminando de una de las mejores playas de la Costa Azul. El personal fue increíblemente atento y amable, especialmente una señora irlandesa que estaba de prácticas. ¡No puedo esperar para volver!

Lo único que pediría es que el hotel ofreciera actividades más divertidas para jóvenes como nosotros. Tal vez una noche de fiesta o una discoteca en la piscina.

La piscina es preciosa. El desayuno es generoso y delicioso, con una variedad de carnes y huevo cocido. - La habitación estaba bellamente decorada, nueva y con vistas al mar. - La ubicación es ideal, a un paseo corto de la Playa Baie des Fourmis. - Disfrutamos de un restaurante muy bueno que ofrecía comida francesa.

El Hotel Carlton superó nuestras expectativas con una habitación grande y luminosa, con un ventanal muy cómodo y estiloso. Disfrutamos mucho de la piscina, que era muy agradable y lo mejor es que estaba abierta las 24 horas, incluso por la noche. Además, la playa estaba bastante cerca y el paseo junto al mar hacia Cap Ferrat fue realmente recomendable.

Los alimentos para el desayuno podrían mejorar simplemente ofreciendo más opciones.

Este lugar tiene una ubicación ideal, está bien presentado y muy limpio, con un personal absolutamente agradable y complaciente, y los desayunos se sirven en la panadería.

Mi estancia en este hotel fue excelente. Obtuvimos un gran valor por nuestro dinero, ya que la habitación era espaciosa, luminosa y cómoda, con grandes ventanales. La piscina era muy agradable y lo mejor de todo es que nunca cerraba, así que podíamos disfrutar de un baño en cualquier momento, incluso de noche. La playa también estaba cerca y el entorno era increíblemente hermoso, especialmente el paseo junto al mar hacia Cap Ferrat. El personal del hotel fue muy atento y amable, especialmente una señora irlandesa que estaba haciendo prácticas. Recomendaron lugares para visitar y comer, y se esforzaron por satisfacer todas nuestras necesidades. Además, moverse por los alrededores con el coche fue muy fácil y el servicio de snack del hotel era excelente y a precios razonables. En general, fue una experiencia tranquila y relajante en un hotel encantador.

En cuanto a la experiencia del desayuno, sería genial si ofrecieran más opciones de cena.